Desde Red Acoge llevamos más
de 25 años defendiendo y promoviendo los derechos de las personas migrantes y
refugiadas. En este noveno encuentro anual de voluntariado, que estamos
celebrando este fin de semana, queremos en primer lugar agradecer la
generosidad y compromiso de las más de 900 personas que a diario nos regalan su
solidaridad.
También
estamos aquí para recordar que las 18 organizaciones que formamos Red Acoge
seguimos apostando por la misma convicción que nos vio nacer: la apuesta por
una sociedad donde los derechos humanos no estén limitados por la nacionalidad,
restringidos por fronteras ni determinados por el hecho fortuito del lugar de
nacimiento de las personas. Una sociedad donde todos sus integrantes puedan
gozar de los mismos derechos sin discriminación alguna y en igualdad de
condiciones.
Trabajamos
por los derechos de las personas migrantes y refugiadas con independencia de su
situación legal, la forma en la que llegan a las fronteras, su lugar de
procedencia o sus creencias religiosas. Todas ellas tienen los mismos derechos
y deben ser tratadas con respeto y dignidad, en igualdad de condiciones y sin
discriminación alguna.
La
movilidad humana es una compleja realidad que hoy en día está caracterizada por
la enorme pérdida de vidas humanas, la impunidad para los autores de esos
hechos y una tolerancia generalizada ante esas muertes. Las personas migrantes
y refugiadas sufren graves violaciones de sus derechos a lo largo de todas las
etapas migratorias: rutas de huida llenas de riesgos, redes de tráfico ilícito,
condiciones laborales de explotación y una larga lista de situaciones
intolerables a las que necesitamos poner fin.
A
la hora de buscar soluciones, queremos una política
migratoria y de fronteras que no sea cortoplacista y que tenga siempre como eje
central los derechos humanos. Por ello, seguiremos trabajando para conseguir:
- Vías legales y
seguras para las personas
que deciden llegar a Europa
- Políticas que fomenten
la igualdad de oportunidades y la plena integración de las personas migrantes, sin criminalizarlas nunca a ellas ni a
sus desplazamientos.
- El cierre
de los CIES
- El fin
de los acuerdos de devolución que destruyen el proyecto de vida de miles de
personas sin permitirles solicitar protección.
- La derogación de
la normativa con Ceuta y Melilla que permite una
práctica absolutamente ilegal como son las “devoluciones en caliente”.
Cada vez somos más
las personas y organizaciones que levantamos nuestra voz para exigir al Estado
que cumpla con sus obligaciones. Y también sabemos que son muchos los
defensores y defensoras de derechos humanos que están siendo amenazados y
criminalizados por acoger, por ayudar, en definitiva, por salvar vidas.
Ante estas
barreras, se hace cada vez más necesario que todos y todas unamos fuerzas y
trabajemos codo con codo para conseguir una sociedad justa, diversa y
cohesionada. Hoy queremos destacar el trabajo de un aliado fundamental, Guada
Acoge, a quien hoy felicitamos por sus 25 años realizando una labor fundamental
en la defensa, como ella dice, de “una convivencia sin diferencias”.
Os invitamos hoy a
sumaros a esta convivencia sin diferencias, a formar parte una acción colectiva
que derribe fronteras y promueva una sociedad más justa y diversa en la que
nunca más haya que recordar que NINGUNA PERSONA ES ILEGAL.
